El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, ha expresado su inconformidad luego de que la Unidad Nacional de Protección (UNP) le notificara la reducción de su esquema de seguridad en más de un 50%. Según Gutiérrez, la resolución recibida establece que dos de sus vehículos blindados serán retirados y solo contará con una persona designada por la UNP para su protección. Ante esta decisión, Gutiérrez afirmó: «Ellos verán, yo aquí voy a seguir hablando, no nos van a callar, háganle, no se preocupen. Yo veo cómo me cuido y cuido a mi familia».
La Alcaldía de Medellín ya ha presentado una apelación ante esta medida, incluyendo una copia a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, argumentando que Gutiérrez, quien ha sido catalogado con un nivel de riesgo extraordinario, debe mantener su esquema de seguridad completo. Pese a la decisión de la UNP, el mandatario contará con el apoyo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá para garantizar su seguridad y la de su familia.
En un tono crítico, Gutiérrez señaló que mientras a los líderes de la oposición se les reduce la seguridad, otros, a quienes calificó como «los peores criminales», reciben refuerzos en sus esquemas. El alcalde advirtió que si algo le llegara a pasar a él o a su familia, responsabilizaría directamente al gobierno del presidente Gustavo Petro. La UNP justificó la reducción del esquema de Gutiérrez argumentando que su riesgo se ha disminuido significativamente desde las elecciones presidenciales de 2022, donde participó como candidato.
